CLUB DE LECTURA:
EL HOBBIT, J.R.R. TOLKIEN
«Cierto que casi siempre se encuentra algo, si se
mira, pero no siempre es lo que uno busca».
El Hobbit, J.R.R. Tolkien
"Estaba corrigiendo examenes en Oxford
y, de golpe y porrazo, en un folio en blanco que un alumno me dejó, empecé a
escribir: 'En un agujero, en el suelo, vivia un hobbit'”. Así nos explica
Tolkien el origen de El Hobbit, que
escribió por partes desde finales de los años 20 hasta principios de los años
30. Lo que era un cuento escrito para entretener a sus hijos, acabó en las
manos de C.S. Lewis, el conocido escritor de Las Crónicas de Narnia, que incluso escribió un par de reseñas
anónimas en el periódico Times, elogiando a su amigo: «El Hobbit, -
escribió - resultará muy gracioso a los lectores más pequeños, y sólo años más
tarde, a una décima o vigésima lectura, empezarán a darse cuenta del diestro
conocimiento y la profunda reflexión que fueron necesarios para que todo en él
pareciera tan maduro, tan amistoso y, a su modo, tan veraz. ».
Tolkien llevaba ya 10 años
trabajando en El Silmarillion, obra todavía
inacabada, y que sirvió de inspiración para El
Hobbit, así como en cuentos y relatos mitológicos a los que era aficionado.
Con todos estos elementos, Tolkien creó La Tierra Media y a los seres –
hobbits, enanos, elfos, orcos, etc – que allí habitaban.
El Hobbit cuenta la historia de Bilbo Bolsón, un hobbit que vive en
La Comarca y que es, como todos los hobbits, nada aficionado a las aventuras. Tranquilo
y hogareño, es feliz con una buena comida y tomando el sol en la puerta de su
agujero hobbit, preferiblemente fumando en su pipa. Pero todo eso cambiará
cuando el mago Gandalf llame a su puerta. Bilbo terminará uniéndose a un grupo
de enanos, encabezado por Thorin II Escudo de Roble, en calidad de saqueador,
para acabar con el dragón Smaug y recuperar Erebor, la Montaña Solitaria. En su
camino, tendrá que escapar de los trolls y de los trasgos de las Montañas
Nubladas. Conocerá a los elfos de Rivendel y del Bosque Negro. Se enfrentará a
las arañas y a los huargos. Encontrará a Gollum y a los hombres de Esgaroth, la
Ciudad del Lago. Todo ello, acompañado de grandes dosis de fortuna y de buen
juicio, lo que le harán salir victorioso de las situaciones más comprometidas.
Esta novela ha tenido múltiples
lecturas a lo largo de la historia. Hubo quien la presentó como una metáfora de
la Segunda Guerra Mundial, lo que Tolkien no tardó en desmentir. Lo que sí que
es cierto, es que es considerada una novela de desarrollo personal, de búsqueda
de la madurez. El Hobbit refleja los
arquetipos míticos de iniciación, ya que nos encontramos ante un héroe (Bilbo)
que regresaría del inframundo (la montaña de Smaug) con un premio en su poder.
Otros temas que Tolkien reflejó fueron la superación de la codicia y del
egoísmo, encarnados en los enanos. En lo que todos los críticos se ponen de
acuerdo, es que en esta novela se encuentran presentes los grandes temas de la
literatura de Tolkien: el poder, la codicia, la guerra y la muerte.
Tolkien obtuvo tan buenas
críticas con El Hobbit, que inició
otra novela ambientada en la Tierra Media. Recuperando la historia del anillo
que Bilbo le arrebata a Gollum, Tolkien redactó, en un tono mucho menos
amistoso y ligero, El Señor de los
Anillos, la que sería su obra cumbre.
Y, ¡Por fin! Se ha estrenado este
mes de diciembre la esperada adaptación de Peter Jackson de la novela de
Tolkien. El director que nos deleitó con su memorable adaptación de El Señor de los Anillos, vuelve a la
Tierra Media para contarnos una historia, a priori, mucho más sencilla, pero
cuya realización ha resultado más costosa de lo esperado. Es una estupenda
oportunidad de volver a disfrutar del universo mágico de Tolkien: pasen y vean.
1 comentario:
Me leí este libro hace unos años y me parece un libro muy interesante y divertido. Os lo recomiendo.
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